Luego de que unidades militares compuestas principalmente de soldados de élite de los Halcones del Desierto y marines capturaran el Castillo Toubal y el monte Huwaysat Shams en la región de Jabal al-Akrad en el noreste de Latakia, el ejército pudo liberar nuevos territorios.
Así, tras obtener control de las colinas que rodean la ciudad, el ejército recuperó el bastión jihadista de Kinsiba, ubicada en la campiña del noreste de la provincia costera de Latakia.
Las tropas gubernamentales han continuado avanzando tras fortificar las alturas que rodean la localidad, con el objetivo de impedir que un contra-ataque terrorista pueda revertir lo logrado.
Los jihadistas se retiraron de la ciudad luego de que el convoy enviado con refuerzos fuera emboscado, en un ataque en el que murieron más de 50 terroristas.
Si bien la ciudad estuvo vacía durante algunas horas, las tropas sirias sólo avanzaron cuando los flancos estuvieron cubiertos, de manera de impedir que los terroristas utilizaran carros bomba para romper las líneas, tal como sucedió la vez anterior que el ejército capturó Kinsiba.